Rédes que manejo-

viernes, 31 de octubre de 2008

Leonel, (Cuento sobre el Día de Muertos, constumbre Mexicana)




Leonel salio a traer agua cuando la luna estaba en el cenit de sus sueños, dejo abierta la puerta de su casa, camino al rió y con su charola de plástico de azul chiclamino recogió el agua, y se quede mirando al cielo, la luna enorme alumbraba todas las esquinas y rincones inesperados del campo que lo rodeaba, y el aire llevaba los sonidos del recuerdo de la caja vieja sinfónica que con tanto orgullo tocaba las melodiosas canciones de sus tiempos:

Salías del templo un día llorona

Cuando al pasar yo te vi,

Salías del templo un día llorona

Cuando al pasar yo te vi,

Hermoso Huipil llevabas, llorona

Que la virgen te creí

Hermoso Huipil llevabas, llorona

Que la virgen te creí.

Hay de mí, llorona, llorona

de azul celeste

Hay de mí, llorona, llorona

de azul celeste

No dejare de quererte, llorona

Aunque la vida me cueste,

No dejare de quererte, llorona

Aunque la vida me cueste.

Todos me dicen el negro, llorona

Negro pero cariñoso

Todos me dicen el negro, llorona

Negro pero cariñoso,

Yo soy como el chile verde, llorona

Picante pero sabroso,

Yo soy como el chile verde, llorona

Picante pero sabroso.

(Canción popular mexicana)


Al regresar Leonel, su esposa Roció con tanto entusiasmos le pregunto - ¿ que vamos aponer este año en la Ofrenda para nuestros muertitos? Leonel con enojo le respondió - ¡hay mujer! No vez que apenas tenemos para comer, y tu quieres malgastar la poca comida que tenemos en la ofrenda, pa´que se eche a perder, ¡NO, No vamos a poner nada, no me insistas mas!.


Al día siguiente, en las vísperas del 2 de noviembre Leonel salió como era de costumbre a traer el agua al rió, pero esta vez quería ver la luna desde la cima del cerro, recordó que en aquel monte había un manantial hermoso y transparente y con tanto entusiasmo subió al cerro, en el transcurso del camino a lo lejos se percato que venia una multitud de gente hacia al pueblo, con un resplandor sin igual, eran los difuntos parientes que iban a visitar a sus familiares, se fijo que en la primera fila iban niños, en la segunda gente adulta, y la tercer fila la gente mas grande, y en esa multitud iban sus padres de Leonel, del susto se escondió detrás de un arbusto y se quedo toda la noche ahí.


Cancion:

Todos me dicen el negro, llorona

Negro pero cariñoso,

Todos me dicen el negro, llorona

Negro pero cariñoso,

Yo soy como el chile verde, llorona

Picante pero sabroso

Yo soy como el chile verde, llorona

Picante pero sabroso

Hay de mi, llorona, llorona, llorona

Llévame al rió

¡Tápame con tu reboso, llorona!

Por que me muero de frió

Si por que te quiero, quieres, llorona

Quieres, que te quiera más

¡Si ya te he dado la vida, llorona!

¿Qué más quieres?

¡quieres, más!


En la mañana al despertar Leonel regreso a su casa, pero esa misma multitud que vio aquella noche, se la topo de regreso, iban a la cima del cerro, se percato que todos los muertitos iban felices, con su comida en mano y sus veladoras alumbrando su camino, pero dos personas se miraban tristes y traían en la mano una tortilla y quelites, eran sus papas de leonel.


Al llegar a su casa Leonel abrazo a su esposa Rocío y le dije - ¡mujer! Te prometo que el siguiente año trabajare mucho, para tener comida y dinero, y poner un ofrenda grande llena de toda la comida de nuestros muertitos, y por cierto ¿Qué pusiste en la ofrenda? Su mujer respondió – como solo tenia una tortilla y un montosito de quelites, eso puse a nuestros muertito. Y cuando su mujer Rocío termino de decirle, Leonel se desvaneció en el aire y murió llevándose todos sus entusiasmos de mantener al costumbre mexicana del Día de muertos.

Canción:

Ella es flama que se eleva,

Y es un pájaro a volar

En la noche que se incendia

Estrella de oscuridad,

Que busca entre la tiniebla

La dulce hoguera del beso

quema el amor en sus labios,

El infierno es este cielo.


Adaptación del cuento por Dídac.





Fotografías: 1° "LA catrina" de Silvia Ji

2° "La llorona" de Rosa M.

3° "La llorona" de C. Wilkins

4°ofrenda típica del Estado de Michocán, México.


11 comentarios:

Fire_tony dijo...

La primera foto, de la catrina, está de no mames.

No es que sea culero, pero no me gustan los cuentos de terror.

Yo soy una ofrenda típica de Michoacán.

Dídac Muciño dijo...

jajaja,
no es un cuento de terror!!aassh
es un cuento que realza, la contumbre mexicana de poner las ofredas ¬¬

Sascha! dijo...

Me encantó la primera imagen también... estuvo chingona...

el cuento, historia, escrito?

estuvo chido también, aunque a veces me perdía un muchote, tenía partes que me hacían reir...

vanto y vanchi dijo...

Me gustaría que participaras en un proyecto que traigo entre manos. Para que lo entiendas, tendrás que ver mi nuevo post, y luego tú y yo hablaremos al respecto.

¡Bú!

Beto dijo...

weyyyy escribes bien chingón, es neta, normalmente nunca acabo de leer post de este tipo, pero este me atrapó

Anónimo dijo...

sentimos la herencia de un pasado formidable... tantas historias y tantos cuentos que no nos dejan de recordar que debemos venerar a los ancestros y jamás olvidar de donde venimos... contradicción de la vida moderna.

La Lloron es la neta del planeta...

Él dijo...

Bu!!


Je je. Por eso de los muertos. Y como no quiero ser uno para tí, he venido para que sepais que aún vivo.

dehg dijo...

Changos, este año me volví a quedar sin postear algo relativo al día de muertos. En fin, ya será para el siguiente, espero que no muera como Leonel.

Saludotes!

Morgana dijo...

maravillosa catrina, maravillosa

y la muerte un poco mas

Beto dijo...

brother para nada fue sarcasmo mi comentario, lo digo de verdad, escribes muy muy bien.

Tu asesino dijo...

la llorona buenas imagenes he escrito!

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